- Mejora las propiedades físicas, químicas y biológicas del suelo.
- Proporciona sustancias útiles como enzimas, aminoácidos, vitaminas, hormonas y antioxidantes que aumentan la resistencia a enfermedades y promueven el desarrollo de microflora nativa.
- Promueve ambiente fermentativo no apto para el desarrollo de patógenos como
nemátodos y enfermedades como fusarium, phytophthora, entre otras. - Acelera la descomposición natural de materia orgánica sin malos olores.
- Optimiza la disponibilidad de nutrientes y mejora la eficiencia de fertilizantes.
- Actúa en la biorremediación de suelos salinos.
- Reduce costos de producción (menos productos de control y fertilización).
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