En un momento crucial en la toma de decisiones agrícolas, los suelos supresivos son clave para la sostenibilidad ambiental y del negocio: reducen pesticidas, mejoran la calidad del suelo, aumentan productividad y fomentan la biodiversidad, te mostramos cómo aprovechar sus ventajas.
El suelo sano, y vivo, junto con la recuperación del suelo y la reducción de costos, son pilares fundamentales para una agricultura sostenible y equilibrada con el medio ambiente. Con estos objetivos nace el concepto de «suelo supresivo».
Los suelos supresivos son aquellos que poseen una capacidad natural para suprimir el crecimiento y la propagación de patógenos y enfermedades que afectan a los cultivos, esta propiedad se debe a la interacción de microorganismos y la raíz de las plantas, creando una barrera protectora que reduce la incidencia de enfermedades, por lo que es fundamental para mantener la vida y la salud del suelo.
”Estos suelos promueven agricultura sostenible al disminuir la necesidad de utilizar agroquímicos y mejorar la calidad de los cultivos. Además, contribuyen a la salud del ecosistema agrícola y pueden reducir los costos de producción. Su aplicación ofrece una alternativa eco-amigable y resiliente para los agricultores al enfrentar los desafíos presentes y futuros en la producción de alimentos".
Ana Patricia LuengasDirectora técnica de Biopunto.
Un suelo vivo es aquel que alberga una abundante biodiversidad de microorganismos, hongos y otros seres vivos que interactúan en simbiosis para mantener la salud del suelo.
Esta comunidad subterránea realiza funciones esenciales, como la descomposición de materia orgánica, la mejora de la estructura del suelo y la disponibilidad de nutrientes para las plantas. Al potenciar un suelo vivo y saludable, los agricultores pueden reducir la dependencia de fertilizantes y la dependencia de pesticidas químicos, disminuyendo así los costos de producción y minimizando el impacto ambiental.
Acciones para lograr y mantener la salud del suelo
La recuperación del suelo es otro aspecto crucial para una agricultura sostenible. Con prácticas como la rotación de cultivos, el uso de abonos orgánicos y la implementación de técnicas de conservación del suelo, los agricultores podrán mejorar la salud y la fertilidad del suelo, lo que se traduce en una mayor productividad.
Te presentamos 5 estrategias que ayudarán a optimizar tu producción, proteger el medioambiente y reducir costos.
- Rotación de cultivos
- Cobertura de suelos y corredor biológico
- Enmiendas orgánicas y abonos verdes
- Reponer los minerales necesarios y microorganismos para realizar corrección biológica del suelo.
- Labranza Mínima Y Reciclaje De Residuos De Cosechas
Para llevar a cabo este cambio es importante diseñar la estrategia teniendo una visión holística del agrosistema.
En línea con la visión de Biopunto, la clasificación de suelos según Fundases (EM™ en Colombia) también es una herramienta valiosa para comprender y evaluar los diferentes tipos de suelo presentes en la región. Esta clasificación proporciona información valiosa para adaptar las estrategias de recuperación y conservación del suelo de acuerdo con sus características específicas.
Con su enfoque en la transferencia de biotecnologías y buenas prácticas de producción limpia, Biopunto se posiciona como un aliado clave para los agricultores y ganaderos que buscan optimizar sus operaciones, reducir costos y lograr una producción sustentable y responsable con el medio ambiente.
Clasificación microbiológica de suelos
